Se cayeron mis alas y yo no me rendí, así que ven aquí, brindemos que hoy es siempre todavía, que nunca me gustaron las despedidas. Ismael Serrano 



 

El amor tiene un duende que ríe, que enciende, que crea y recrea y aunque al diablo le pese, retoña y florece y al mal lo voltea. Eladia Blazquez